Cosas que tu gato odia

Para decir a tu minino que lo quieres, te aconsejamos conocer mejor el lenguaje corporal de los gatos; en definitiva, se trata de evitar algunas cosas que tu gato odia en el día a día

Algo que todos los propietarios sabemos es que nuestros felinos son dueños de una personalidad singular y con preferencias bien definidas. Cuando tu gato odia algo, es probable que lo deje muy claro con sus comportamientos cotidianos.

Además de no ser fácil, tampoco es recomendable ignorar las conductas de tu minino, ya que suelen decir mucho sobre su salud y bienestar. Por ello, analizamos a continuación las cosas que tu gato odia y que debes evitar en su rutina para ofrecerle una óptima calidad de vida.

 

 

6 cosas que tu gato odia y debes evitar en su cotidiano

 

Estas son algunas de las costumbres y hábitos que debemos evitar para una mayor felicidad de nuestro amigo felino:

 

Mala higiene

 

Los felinos son animales muy limpios que suelen dedicar varias horas de sus días a su aseo personal. Una higiene inadecuada de su ambiente es una de las cosas que tu gato odia y que pueden perjudicar seriamente su salud. Por ello, hemos preparado algunos tips básicos para dar una óptima higiene a tu minino:

  • Recoger diariamente las heces y orina del arenero con la ayuda de una pala. Para ayudarte en esta tarea, te aconsejamos conocer las arenas de tipo aglomerante.
  • Higienizar al menos una vez por semana la caja de arena de tu gato, mientras utilizas jabón neutro y agua tibia. No se recomienda usar productos corrosivos o irritantes, ya que pueden generar alergias y afectar las mucosas del felino.
  • Ubicar la caja de arena siempre en un lugar bien distanciado del área de reposo y alimentación del minino. Preferentemente, situarla en una habitación bien ventilada y con buena luminosidad.
  • Evitar el cúmulo de suciedad en el hogar, para así mantener una rutina de higiene sustentable.
  • Enseñar a un gato a usar la caja de arena.

 

Olores cítricos

 

Para nosotros, las flagrancias cítricas pueden resultar muy agradables. No obstante, los cítricos están entre los alimentos malos para los gatos y su olor resulta extremadamente repulsivo para ellos.

A pesar de percibir bien los sabores ácidos, este tipo de alimento tampoco agrada a los felinos, por lo que suelen rechazarlos naturalmente. Probablemente, se trata de una capacidad adaptativa que su organismo ha desarrollado, ya que los cítricos pueden provocar graves problemas digestivos, como diarreas y vómitos.

 

Cambios repentinos en su rutina y ambiente

 

Los animales en general suelen aferrarse a una rutina como forma de protegerse y evitar la exposición innecesaria a posibles riesgos a su bienestar. Los gatos no son una excepción, y aprecian fuertemente mantener hábitos en su día a día para sentirse seguros en su entorno.

Cualquier cambio repentino en la rutina o ambiente de tu gato, probablemente, repercutirá negativamente en su salud y comportamiento. Por ello, recuerda que tanto los pequeños cambios como una mudanza deben ser hechos de forma gradual, mientras se respetan los tiempos de adaptación de cada minino.

 

La exposición innecesaria al agua

 

A menos que tu felino pertenezca a una de las razas a las que le gustan el agua, una de las cosas que tu gato odia será la exposición directa al agua. Esta relación peculiar con el agua es una de las características más emblemáticas de los mininos.

Si bien algunos gatos puedan adaptarse a bañarse con cierta periodicidad, lo ideal es recurrir a métodos de baño en seco para limpiar a tu minino. En las tiendas para mascotas es posible encontrar espumas para dar un baño en seco a gatos, y también se pueden utilizar soluciones caseras, como el empleo de bicarbonato.

 

Ruidos fuertes

 

Los gatos tienen sentidos realmente privilegiados y su audición es mucho más poderosa que la nuestra. Por ello, los ruidos fuertes y los estímulos violentos son unas de las cosas que tu gato odia.

Un ambiente positivo es clave para el desarrollo físico, cognitivo y emocional de todo felino. Ello significa que hay que proporcionar un hogar positivo, donde tu gato encuentre las condiciones óptimas para sentirse seguro y querido.

 

Demostraciones de afecto muy humanas

 

Los gatos mantienen un lenguaje propio, que no se rige por los mismos códigos que el nuestro. La conducta social de los mininos no incluye demostraciones de afecto humanas, como abrazos o besos. Por ello, este tipo de actitudes suelen resultar incómodas para tu gato, que probablemente querrá escaparse.

Por supuesto, tu felino no se muestra así porque no te quiere, sino porque no comprende tu actitud como un signo de afecto. Esta demostración le hace sentir como aprisionado por no poder moverse libremente.